El pasado 27 de enero, se conmemoró el Día de la Memoria del Holocausto,
instituido por la ONU en recuerdo de este mismo día pero del año 1945
en que el ejército de
la extinta Unión Soviética liberó el campo de exterminio nazi de
Auschwitz-Birkenau.
Relatos breves y otras cosas más…
¿VIVIR OTRA VEZ?
Por: Dr. Antonio Llaca.
Amberes. Bélgica/ Septiembre de 1998.
Amberes (Antwerpen en idioma holandés) es una
ciudad sencillamente deliciosa, más llena de historia que de gente, es de esos
sitios donde la vida moderna con su extraordinaria dinámica conjuga
perfectamente con un ambiente cargado de hechos ocurridos en los últimos diez ó doce siglos en una armonía digna de la envidia de
cualquier otra gran ciudad del mundo; posee el más importante puerto del norte
de Europa y la mayor industria de tallado de diamantes del mundo, pero por sobre todo, es una ciudad llena de
arte.
Allá estuve
hace algunos años, mi anfitrión era el Dr. Issa un
excelente radiólogo belga de origen libanés
que a sus vastos conocimientos en esta rama de las Ciencias Médicas unía un profundo sentido de la ciudad, de sus
calles, plazas, edificios, iglesias, puerto y de la vida y obra de Pedro Pablo
Rubens, el famoso pintor flamenco del siglo XVII, todo un símbolo de la urbe;
creo que el azar no me hubiera podido deparar mejor guía.
Comenzamos el recorrido por uno de los sitios
emblemáticos, la Grote Markt, Plaza
del Mercado o Gran Plaza en cuyo centro se yergue la estatua de Brabo,
el soldado romano que según la leyenda fundó
la ciudad, de fondo el edificio del Ayuntamiento, joya arquitectónica del siglo
XVI, y de aquí a la imponente Catedral
de Nuestra Señora edificación del siglo XIV que a más de resistir el paso de los años continúa siendo una de las más grandes del
mundo, el periplo incluyó además la visita obligada a la Estación Central de
trenes, el cercano Zoológico y el Real Museo de Bellas Artes que atesora obras
de los más relevantes pintores y escultores europeos de los últimos seis siglos
y donde mi acompañante quien ya había hecho gala de sus conocimientos acerca de
la arquitectura de la ciudad me dejó nuevamente sorprendido con sus explicaciones de las sin iguales creaciones atesoradas en el Museo.
Una visita a Amberes resulta incompleta si no pasas al
menos unos minutos en el Distrito de los Diamantes y por allí anduvimos, nunca había visto tantas joyas y brillantes juntos, cualquier vitrina de las
múltiples tiendas dedicadas a este lucrativo negocio contiene una fortuna en
oro y alhajas, lamentablemente la escasez de fondos en mis bolsillos no me
permitiría acceder a estas preciosas piedras que una numerosa comunidad judía trabaja y
comercializa; el final de nuestro recorrido era
el Puerto, la más importante arteria económica de la ciudad y por qué
no, también del país, al que alguien llamó “El Puerto de Europa” y razón no le faltó, su extensión abarca más de 50 kilómetros de muelles donde
centenares o miles de embarcaciones trasiegan casi cualquier cosa imaginable, y
como colofón una visita al Museo Marítimo Nacional situado en el imponente
Castillo Steen -el edificio más
antiguo de la ciudad- que construido hacia el año 1200 ha sido a lo largo de
los tiempos fortaleza, prisión durante cinco siglos, residencia de Rubens por
diez años y hoy museo que abarca desde los inicios hasta los más recientes
adelantos en el arte de la navegación, a la entrada, una estatua del mítico gigante Antigoon,
el tirano del río Escalda, nos remonta
una vez más a sus orígenes.
Cuenta la leyenda- dice mi anfitrión- que el río, una
importante vía para el tráfico marítimo de esta parte de Europa desde tiempos
inmemoriales, era vigilado por el gigante Druon
Antigoon quien asaltaba los barcos que por aquí transitaban exigiendo a la
tripulación un fuerte rescate, a aquellos que se negaban a pagar les cercenaba
las manos y las lanzaba al torrente hasta que apareció en su cauce una nave de guerra romana, a bordo viajaba el soldado Silvius Brabo quien se negó a pagar el recate y enfrentó en
terrible combate al gigante logrando matarlo y cortarle la mano que luego
arrojó al río, de ahí proviene el nombre de la ciudad, en neerlandés Ant significa
mano y werpen lanzar o arrojar, pero esto nos es más que una leyenda, quizás
sea la versión belga del relato bíblico de lucha entre David y Goliat y quedó formando parte del acervo cultural de
Flandes aunque el hecho histórico bien
documentado es que Amberes se fundó
alrededor del año 640 (siglo VII) por unos monjes benedictinos, los romanos, por supuesto, fueron muy anteriores a esta fecha…
-Pues por mi parte –añadí- creo que lo más importante
es la enseñanza que nos da la leyenda: el gigante que tantas manos cortó terminó
sus días de igual manera, con la mano cercenada, ¿justicia humana o divina?, ¿quién lo podría saber?,
el mensaje es: puede ocurrirte exactamente
lo mismo que has hecho a los demás…
-Y así es en efecto aunque en oportunidades la
justicia no llega, al menos de la forma visible como la esperamos nosotros los humanos, del lado de lo divino nadie puede decir qué ocurre aunque lo suponemos de una u otra
forma según sea nuestra fe, vea Ud., en
estos momentos en Europa recordamos los
inicios de la Segunda Guerra Mundial, ¿cuántos murieron en la contienda?,
¿cuarenta, cincuenta millones?, ¿hubo justicia para todos?, lo más probable es
que no, al menos de la que suelen impartir en nuestros tribunales, y a
muchísima gente solo les quedó esperar por la otra justicia, la divina, pero
volviendo a la leyenda, también nos dice
de la profunda relación que ha tenido esta ciudad con todo el mundo desde
tiempos remotos y en cuanto a esto no ha
habido excepciones, incluso con ustedes los cubanos; si mi memoria no falla,
hubo un incidente entre un barco alemán
lleno de emigrantes judíos en La Habana que terminó en Amberes precisamente a comienzos de la Guerra, muchos
de estos emigrantes terminaron en campos de concentración nazis, quizás conozca
Ud. algo de esto…
Múnich. Alemania. / 9 de Noviembre de 1938.
La noche del 9 al 10 de noviembre o Noche de los Cristales Rotos (Kristallnacht) será de triste
recordación para los judíos por siempre. El atentado y muerte de un diplomático alemán en París fue
el pretexto utilizado por la más alta jerarquía nazi para desencadenar el
terror contra la comunidad judía asentada en Alemania y Austria; grupos del
Partido Nacional Socialista (Nazi) apoyados por la Juventud Hitleriana y las SA –tropas de asalto del Partido- asesinaron
noventa y un judíos e hirieron a
centenares, 25,000 fueron arrestados y conducidos a campos de concentración, 300 sinagogas resultaron quemadas y miles de
negocios destruidos, se iniciaba con este pogromo (a) un salvaje plan de exterminio que llevaría
a la muerte a unos 6 millones de miembros de esa colectividad, el terror se
apoderó de este grupo humano, ser judío se había convertido en un delito y la
única esperanza de sobrevivir era la huida a cualquier sitio lejos del nazismo
pero la persecución, los abusos y el
genocidio contra los hebreos se extendería hasta el otro lado del Atlántico, había
que purificar Reich y el planeta de la contaminación semita.
Hamburgo. Alemania. / Mayo de 1939.
El 13 de mayo parte hacia La Habana desde el puerto de
Hamburgo el buque de pasajeros Saint Louis propiedad de la compañía naviera Hamburg Amerika Linie
(Hapag), a bordo lleva 943
pasajeros, de ellos, 936 refugiados judíos que en su mayoría han obtenido
“certificados de desembarque” emitidos por el Director General de Inmigración
de Cuba Manuel Benítez González -también conocido como “El Bonito”- mediante compra a funcionarios diplomáticos venales del
consulado cubano en Berlín. Benítez,
hombre sin ningún tipo de escrúpulos, había amasado una “bonita” fortuna con el
negocio de venta de certificados a un precio de 150 dólares cada uno, secreto a
voces que también había puesto al descubierto la formidable red de corrupción
imperante en Inmigración. El Presidente cubano Federico Laredo Brú declaró
inválidos los “certificados” días antes de la partida del Saint Louis creando
una difícil situación para los refugiados; el nuevo contexto era conocido por la policía alemana, los
funcionarios de la naviera y quizás
hasta por los propios interesados quienes sin embargo desconocían que eran
objeto de una hábil manipulación por parte del Ministerio de Propaganda nazi de
Joseph Goebbels: empujar a los judíos a una salida masiva de Alemania pero
también impedir su entrada en terceros países.
La Habana. Cuba/ Años 1930.
La década de los treinta fue época de profundas convulsiones políticas para la sociedad cubana, sucesivamente había
conocido la feroz dictadura de Gerardo Machado, la Revolución de 1933, la
aparición del ex sargento taquígrafo
Fulgencio Batista como hombre fuerte de la política en la Nación y los
reiterados intentos del pueblo cubano por restaurar el sistema democrático perdido
de larga data, la economía había transitado de la terrible crisis mundial
a inicios de esos años a una lenta recuperación acelerada hacia finales de la
década por los sucesos en marcha en Europa pero La Habana, no obstante los vaivenes
y sacudidas a que se vio sometida, seguía
siendo una ciudad fascinante y maravillosa.
Aun de estreno exhibía un imponente Capitolio mucho
más sólido por su estructura de acero, concreto y las riquezas que reunía que
por la fuerza de las leyes que de allí emanaban, un hermoso y firme Malecón
defendía la ciudad de las en ocasiones ásperas aguas del Atlántico, entre
ambos, el magnífico Paseo del Prado, avenida que albergaba buena parte de los más
elegantes sitios de la ciudad y en cuyos alrededores se desenvolvía una febril actividad
cultural; para 1939 por ahí deambulaban
un tal Carpentier, escritor cubano
recién llegado de Francia ahora productor de radio, otro tal Hemingway,
norteamericano, que entre mojito y mojito rememoraba sus vivencias de la Guerra
Civil Española -quizás ya meditaba acerca de la eterna lucha de los viejos
pescadores del vecino pueblo de Regla
con el mar- y el Sr. Puerta, reportero
del Havana Post que correteaba por estos lados siempre a la caza de alguna
noticia que pudiera interesar a la comunidad angloparlante de una ciudad que
nuevamente había alcanzado sus características cosmopolitas de épocas pasadas.
La Habana. Cuba. / Julio de 1978.
Para ese entonces me encontraba ya de médico recién
graduado, uno de mis primeros pacientes fue el Sr. Puerta, el viejo reportero a
quien los años y el enfisema habían condenado a no alejarse mucho de su
habitación, allá iba a visitarlo y actualizar la medicación que debía tomar,
buen conversador, le gustaba referir sus más relevantes triunfos de toda una
vida dedicada al periodismo y a pesar de
ser en ocasiones repetitivo no resultaba cansón; era un gran conocedor de la
vida republicana desde los años del machadato hasta el momento en que el
periódico para el que trabajaba fue cerrado a raíz de los cambios implantados por la
revolución de 1959, había conocido muchísima gente: políticos, deportistas, artistas,
diplomáticos y hasta presidentes, también tuvo la oportunidad de sondear
algunos de los más relevantes sucesos acaecidos en la capital en aquellos años 30…
-En ese tiempo en Cuba hubo de todo –me dijo- hasta fanatismo
y antisemitismo, un fenómeno extraño
para nuestro pueblo porque siempre habíamos sido muy receptivos con los
inmigrantes, aquí venían a convivir con nosotros españoles, jamaiquinos,
haitianos, chinos, norteamericanos y
grupos minoritarios de otros países, todos eran bien recibidos, sin embargo,
los nazis y falangistas cubanos y españoles se encargaron de realizar una
gigantesca campaña en contra de los judíos…
-Pero ¿hubo nazis en Cuba?, me refiero, de manera
notable u organizada, no como individualidades -inquirí -.
-Sí los hubo, como también había comunistas,
liberales, revolucionarios, demócratas, anarquistas y muchas tendencias más, y también una política de coqueteo, de “dejar
hacer” y a veces hasta de franca simpatía con el fascismo, los falangistas y
los nazis, esto no era nada raro en la América Latina de entonces, para nadie
era un secreto que Perón admiraba a Mussolini y el panameño Arnulfo Arias
sentía profundas inclinaciones hacia las potencias del Eje lo que le costó el
puesto, pero la situación cubana era mucho más compleja, aquí se vivió con gran
intensidad la Guerra Civil Española, había cientos de miles de gallegos (b)
asentados en esta tierra y aunque la mayoría simpatizaba con los republicanos
los falangistas eran mucho más poderosos, este hecho y la proximidad con España hicieron que Franco (c) convirtiera a La Habana en base de la Falange Exterior y los falangistas influían
grandemente en la opinión pública debido al control que tenían sobre los más
importantes medios de prensa, Pepín Rivero (d), propietario del Diario de la
Marina -el más importante periódico de ese entonces- era un genio del
periodismo, hay que reconocerlo, pero era también un ultraconservador,
furibundo admirador de la causa franquista
y sistemáticamente lanzaba campañas antisemitas haciendo el juego del Partido Nazi Cubano que funcionaba en la calle 10 del Vedado y
como los cubanos o no llegan o se pasan, los nazistas caribeños no solo estaban
en guerra con los judíos sino que también pretendían expulsar de aquí a los
haitianos y jamaiquinos; del mismo modo
los fascistas italianos estaban muy activos vía el Partido Fascista Nacional que
contaba hasta con una sección de Damas Fascistas mientras los comunistas, que
seguían al pie de la letra las directivas de Moscú, si bien constituyeron un
sólido apoyo para los republicanos españoles más tarde se vieron metidos en un cuello de
botella cuando Hitler y Stalin firmaron
su tratado de no agresión para luego volver a la carga contra Alemania cuando
entró en guerra con los soviets, estos eran los ecos en esta pequeña isla de
los dramáticos sucesos que se desarrollaban en Europa y se entrelazaban con la
política nacional plagada de contradicciones: Batista, mediante una
desvergonzada maniobra había defenestrado al Presidente Miguel Mariano Gómez y
colocado a Laredo Brú en Palacio aunque el poder real permanecía en sus manos,
siempre siguiendo las directrices de los norteamericanos y trabajando para
ellos, la Falange cubano-española hacía lo mismo para Franco en estrecha
alianza con los nazis y fascistas que le
hacían la corte a Hitler y Mussolini mientras los comunistas seguían en su labor a
favor de Stalin aunque extrañamente aliados a Batista al que apoyaban en casi
todas sus sinvergüencerías a pesar del mariposeo autorizado o al menos muy bien
tolerado por Batista con los nazis, en fin, toda una combinación de intereses,
circunstancias, presiones y movidas muy difíciles de interpretar y más aún de
digerir.
-Y entre la oposición a Batista que de seguro la
había, ¿qué pasaba?
-La cabeza más notable de la oposición era el Dr.
Ramón Grau San Martín, un hombre respetable en esos momentos que no solo era
opositor de Batista sino que mantenía
con este una enconada animadversión; Grau también se vio envuelto en esta
vorágine y tomó partido… por los fascistas; días antes de que llegara a La Habana
un buque repleto de refugiados polacos (e) convocó a una manifestación en
contra de estos que logró reunir cuarenta
mil participantes y para un país que rondaba apenas los cuatro millones de
habitantes esa era una cifra impresionante; la propaganda nazi acusaba
constantemente a los judíos de ser ladrones, criminales o comunistas y de la
inconveniencia para Cuba de admitirlos, los agentes alemanes en La Habana sin
dudas hicieron un notable trabajo logrando influir decisivamente en amplias
capas de la población.
-Pero alguien tuvo que oponerse a semejante barbaridad…
-Efectivamente, hubo también mucha gente que se oponía
a estas cosas, y creo, sin temor a equivocarme, que la voz que más resonó fue
la de Don Fernando Ortiz, el gran sabio cubano.
La Habana. Cuba. / Mayo de 1939.
El día 27 a las 3:00 am arriba al puerto de La Habana el buque Saint
Louis con su preciosa carga de refugiados; familiares, amigos, miembros de la
exigua comunidad judía en la Isla y pueblo habanero observaron la llegada de la
embarcación desde el sólido muro del Malecón y la Alameda de Paula, los
pasajeros a su vez pudieron evaluar las centenarias fortificaciones que desde
hacía siglos defendían la capital, las modernas construcciones que bordeaban el
mar y la febril actividad del más importante puerto de la Isla que como casi todos los puertos importantes
del mundo nunca dormía, sin dudas creyeron llegado el fin de la terrible
pesadilla que los había perseguido desde incluso antes de la Noche de los
Cristales Rotos; un sinfín de periodistas también se reunieron para reportar el
arribo del buque que prometía ser la noticia del día, entre ellos el Sr. Puerta
del Havana Post, una hora más tarde los pasajeros recibían la dura noticia que
ya muchos representantes de la prensa conocían: no se les permitiría desembarcar,
el buque quedaba fondeado en la rada sin
tampoco permitírsele acercarse al muelle de la Hapag-Hamburg.
La Habana. Cuba. / Julio de 1978.
-Y así comenzamos a vivir en Cuba algo que nos resultaba muy ajeno, el episodio tropical
de la persecución a los judíos y, por
supuesto, debido a manipulaciones e intereses que nada tenían que ver con
nuestra manera de ser, franca y abierta con todos, ni con nuestra Historia ni
nuestra cultura, que nunca había conocido de odios irracionales. El periódico
para el que trabajaba seguía atentamente los eventos relacionados con el buque y
el destino de sus ocupantes para quienes
percibía lo peor como en efecto fue. Las esperanzas que estos emigrantes
cifraron en La Habana se fueron desvaneciendo con el transcurso de los días,
Laredo persistía en su posición de no permitirles la entrada al país y con esta
posición cayó de bruces en la trampa preparada por los nazis, Batista, el único
hombre con poder suficiente para cambiar esta situación se distanció
discretamente dejando lo que resultaba un desagradable y difícil asunto en manos de su Presidente pero detrás de todo esto también se
encontraban el Departamento de Estado norteamericano con su Secretario Cordell
Hull y el Presidente Roosevelt quienes
tampoco querían ese barco lleno de refugiados en su territorio…
-¿Y entonces cómo terminó toda esta historia Sr.
Puerta?
-Solo fueron admitidos alrededor de una treintena que
tenían sus papeles en regla, los judíos, que
tenían redes y organizaciones de
ayuda a nivel mundial hicieron todo tipo de gestiones para lograr la admisión
de sus conciudadanos, las radicadas en los Estados Unidos enviaron agentes a
Cuba que trataron de negociar la
estancia de los refugiados con el Presidente
pero este les pedía como garantía o quizás hasta para lucro personal una cifra que les pareció exorbitante, los
negociadores judíos chocaron contra un infranqueable muro compuesto por Hitler,
Roosevelt, Batista y Laredo. La odisea del buque y sus pasajeros en La Habana
duró hasta el día 2 de junio en que fueron definitivamente conminados a
abandonar aguas cubanas, las gestiones aquí se habían agotado y no había más
nada que hacer; yo prescencié la partida y retorcía el alma ver los rostros de
los pasajeros y de
familiares y amigos en el Malecón o en las pequeñas embarcaciones que
trataron de acercarse al crucero, a fuer de ser sincero se estaba cometiendo
una injusticia formidable ya que el interés de los polacos no era siquiera
radicarse aquí sino simplemente esperar por visas que les permitieran marcharse
a Estados Unidos y todos sabían que de ser regresados a Alemania les esperaría
una muerte segura. El Saint Louis fue escoltado por lanchas de la Policía
durante su salida del Puerto y puso proa hacia La Florida, en las aguas cercanas a
Miami también esperaron inútilmente una autorización de última hora por parte
del gobierno norteamericano que les permitiese desembarcar pero esta espera
también resultó infructuosa y el buque tuvo que poner nuevamente rumbo a
Europa. El plan nazi había funcionado de maravillas haciéndole creer al mundo
que nadie quería a los judíos, Hitler y
los nazis se habían anotado una formidable victoria propagandística, lo peor de todo fue que les salió bien.
-¿Y cuál fue el destino final de los pasajeros del
Saint Louis?
-El buque fue autorizado a atracar en Amberes, durante
la travesía los judíos hicieron nuevamente gestiones para evitar que los
pasajeros fuesen retornados a Alemania y lograron que Inglaterra aceptase 288,
Bélgica 214, Holanda 181 y Francia 224, muchos fueron capturados por las tropas
alemanas a medida que iban invadiendo Europa y enviados a campos de
concentración donde aproximadamente la mitad encontraron la muerte, inclusive los niños…,
Laredo, Batista, Benítez y otros tantos en Cuba tuvieron una gran parte de responsabilidad
en este desenlace…, si les hubiesen otorgado una decisión favorable a estos
refugiados se hubieran evitado muchos sufrimientos y muchas muertes, hubieran podido rehacer sus vidas, vivir otra
vez…
Amberes. Bélgica. Septiembre de
1998.
El Dr. Issa había dejado la interrogante en el aire y quedé unos minutos ensimismado rememorando las
conversaciones de años atrás con el viejo Puerta, sin dudas le llamó la
atención mi prolongado silencio por lo que
insistió en su pregunta.
-En fin, ¿conoció algo Ud., acerca del incidente del
buque alemán...?
-Pues sí Dr.
Issa, algo escuché decir sobre el tema…
-Ya ve, este mundo es mucho más pequeño de lo que
pensamos, al final resulta que todos nos relacionamos con todos a veces de la manera más insospechada, pero bien, creo
que ya terminamos con Amberes, al menos por hoy, y que su tiempo se va haciendo
corto…
-Así es, tengo que marchar cuanto antes a Bruselas, mi vuelo de regreso a Caracas no espera…
-Adelante entonces, espero que el auto no nos haga
quedar mal, de todas maneras nos tomaremos unos minutos al pasar por Mechelen,
una pequeña ciudad que nos queda a mitad de camino, allí radicó un campo de concentración nazi, le
resultará interesante verlo…
Bruselas. Bélgica. 8 de Enero de
1944.
Eva Dublon, con solo diez años de edad, es arrestada
por la Gestapo (f) junto a su madre y
una hermana, cinco años antes habían desembarcado en Amberes procedentes de La Habana, fueron de los
pasajeros rechazados por el Gobierno cubano y eran las últimas sobrevivientes
de la familia, el resto ya habían sido asesinados por los nazis.
El día 15 de ese mes es enviada al campo de
concentración de Mechelen utilizado habitualmente como campo de tránsito,
dos días más tarde es trasladada junto a otros sesenta niños al campo de
Auschwitz-Birkenau en Polonia, el mayor campo de exterminio creado por los
nazis, arribó el día 17 en el Convoy No.
23, fue vista por última vez mientras
era conducida a las cámaras de gas.
Bruselas. Bélgica. Septiembre de
1998.
Los aviones nunca esperan pero siempre nos hacen
esperar, aproveché el retraso para
organizar mis notas, rememorar mis recorridos por este hermoso país y
reflexionar acerca del terrible destino de millones de seres humanos durante
aquellos aciagos años de la Guerra Mundial; resultaba muy difícil encontrar una
explicación para tanto sufrimiento, tanto horror y tanta muerte, para que no
hubiese llegado un Silvius Brabo a
cortar las manos que empuñaban las armas, para que tanta gente no hubiera
podido ¡vivir otra vez!.
La familia Dublon durante su travesía a La Habana a bordo del
buque St. Louis, en el recuadro Eva Dublon, a la sazón con cinco años de edad.
Foto cortesía de Archivo
Fotográfico del United
States Holocaust Memorial Museum
Notas de páginas:
(a) Pogrom o pogromo: palabra de origen ruso, linchamiento y/o eliminación de un grupo étnico,
religioso u otro, acompañado de la destrucción de sus bienes. Ha sido particularmente
empleada para calificar las persecuciones contra los judíos.
(b) En Cuba es común denominar genéricamente a los españoles como “gallegos”.
(c) Francisco Franco, dictador, proclamado Jefe del Estado de España desde 1939 hasta su muerte en 1975.
(d) José Ignacio “Pepín” Rivero. Relevante
periodista cubano, también dueño de medios de comunicación.
(e) En
el habla común del cubano se utilizaban frecuentemente
como sinónimos los términos “judío” y “polaco”.
(f) Gestapo (Geheime Staat Polizei): policía secreta de la Alemania nazi.
Notas del Autor:
1.- Mi agradecimiento al Dr. Issa por hacerme partícipe de sus vastos
conocimientos acerca de la arquitectura, arte e historia de Amberes y Bélgica, al
Sr. Vicente Luis Puerta†, viejo reportero del Havana Post por sus apasionantes
anécdotas acerca de Cuba, La Habana y su historia y a los directivos y personal
del Archivo Fotográfico del Museo Memorial del Holocausto, Washington D.C. Estados Unidos.
2.- Bibliografía y otros medios
de información recomendados a los interesados en los temas:
a) Refugiados del buque Saint Louis:
i)-Los excelentes trabajos de la
Prof. Margalit Bejarano docente e investigadora de la Universidad Hebrea de Jerusalén,
gran conocedora de la trayectoria de la
comunidad judía en Cuba, en especial: “La
historia del buque Saint Louis: La perspectiva cubana”.
ii) “Refuge denied: the St. Louis Passengers and the Holocaust” de
Sarah A. Ogilvie y Scott Miller. United States Holocaust Memorial Museum. The
University of Wisconsin Press. 2006. Una extensa y muy bien documentada
investigación que alcanza hasta el destino final de los refugiados.
iii) Los sucesos relacionados con el
buque en su viaje a Cuba fueron llevados al cine, el filme titulado “El viaje de los Malditos” puede ser visto en Cinecuba blogspot con
el siguiente link:
iiii) Archivo fotográfico del United States Holocaust Memorial Museum
b) Cuba, política, sociedad y economía años 1930:
i) “Nueva Historia de la
República de Cuba” del Prof. Herminio Portell-Vilá. La Moderna Poesía.
Miami. USA. 1996, un estudio clásico de la Historia de Cuba desde el periodo colonial hasta el año 1961
con énfasis en la etapa Republicana.
ii) Un testimonio gráfico de La
Habana de los años 1930 titulado “Havana,
Cuba 1930s” puede ser visto a través
del portal You Tube con el siguiente link:
http://www.youtube.com/watch?v=fEMYLkpYxX8&feature=related
© Dr. Antonio LLaca. /El Tigre.
Edo. Anzoátegui.Venezuela.Sept./2009.
Prohibida la reproducción total
o parcial por cualquier medio salvo autorización del autor.
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